Ayer derrotamos a Sud América por 3 a 1, logrando la tercera victoria consecutiva en el Campeonato, lo cual nos permite estar como punteros junto a El Tanque con 9 puntos en 9 posibles (y a la espera de lo que pueda hacer River Plate, quien podría empatarnos si gana su partido atrasado).
El partido, aunque lejos de ser perfecto, fue el que mejor hemos jugado en lo que va del semestre. Sin una actuación maravillosa, Nacho González manejó muy bien los hilos en la mitad de la cancha, teniendo la permanente colaboración de Álvaro Fernández (la figura del partido) y de Alonso (aunque éste no siempre resolvió bien las jugadas).
Por la derecha estuvo lo mejor de nosotros. Las constantes subidas del Flaco (sin la velocidad de años atrás aún, pero con el talento de siempre) fueron una pesadilla para los marcadores del equipo rival. Álvarez (quien otra vez jugó un muy buen partido y fue otra de las figuras) subió también permanentemente por ese lateral, y si a eso le sumamos que lo mejor de Alonso y de Porta se dio por ese lado (al menos en el primer tiempo), puede decirse que el equipo se volcó todo hacia la derecha sin que esto significara volverse predecible, pues fueron muchas las variantes para superar a los defensas rivales.
De todas formas, curiosamente, el primer gol llegó con una jugada por el otro lado. Luego de dos chances perdidas, Alonso logró enviar a las redes un centro mal despejado por el arquero de la IASA, promediando la primera mitad, y el partido se volvió bastante favorable para nosotros a partir de entonces (habiendo sido relativamente parejo hasta ese momento, puesto que ellos respondían a nuestro dominio con contragolpes peligrosos).
El dominio a partir del gol no terminó con una segunda conquista, y para los minutos finales de la primera mitad Sud América se fue arriba otra vez, pero la defensa y Bava se mostraron firmes para sellar la victoria parcial antes del final de los primeros 45 minutos. La sensación en el Parque era que pudimos haber estado ganando por más goles y que en la segunda mitad podríamos ampliar la ventaja, pero que también tendríamos que tener cuidado pues ellos mostraron algunas armas para llegarnos con peligro y empujarnos contra nuestro arco.
En el segundo tiempo empezamos mucho mejor que el rival, presionándolo y llegándole con peligro. Muy pronto, tras la salida de un tiro de esquina, Porta fue derribado en el área y de penal anotó el 2-0. Muy poco después, una nueva subida por izquierda terminó en un error de dos defensas de ellos, y tras una buena triangulación el propio porta hizo el 3-0 y liquidó el partido.
Luego de unos minutos más en el que pudimos haber aprovechado para hacer el cuarto gol, dado el notorio nerviosismo y la frustración de ellos, nos fuimos quedando. Primero el ingreso del Chino por Porta nos tiró un poco atrás (quedamos con un sólo punta, lo que permitió a Sud América subir a sus laterales y plantarse más arriba), y luego el propio cansancio y la desmotivación de saber que el juego estaba liquidado, nos hizo bajar mucho la intensidad.
El Morro entró por González y tuvo un par de chances desperdiciadas por no tenerse confianza en patear y buscar sacarse a un rival más de encima (algo que no es lo que mejor sabe hacer, lógicamente), y tuvimos alguna chance más, pero la realidad es que Sud América fue el dueño de los minutos finales, pese a tener muy poco peso ofensivo y mostrar serias deficiencias e impresisiones. Igualmente, tuvieron su premio pasada la hora, con un tiro cruzado desde la medialuna.
En definitiva, y aunque fue un buen partido, que merecimos ganar de principio a fin, hay que tener mesura. No podemos olvidarnos que en el arranque del partido no le cobraron un penal al equipo rival (algo que podría haber cambiado el desarrollo del juego a partir de entonces), y que los 3 goles nuestros fueron por errores de ellos (mala salida del arquero, un penal innecesario y el choque entre dos defensas al cortar un pase). Aún nos queda trabajo por hacer para poder decir que tenemos un equipo aceitado que le puede ganar a cualquiera.
Formamos con Bava (se mostró seguro, aunque creo que se confió en el gol de ellos, pensando que la pelota iba afuera); Álvarez (subió mucho y con criterio, sin descuidar su sector), De Los Santos (brilló con una solvencia, velocidad y anticipo que hacía tiempo no veía en nuestra defensa), Scotti (seguro y sin inventar cosas raras que le hagan cometer errores, como en partidos anteriores) y Díaz (cerró su lateral); Arismendi (jugó notablemente, sacó mil pelotas y luego de un inicio impreciso, se dio cuenta de que debe jugar fácil al compañero más cercano, redondeando su mejor actuación en el año -pero hay que tener en cuenta que jugar con un sólo volante de marca es demasiado arriesgado para llevarlo a cabo contra rivales más fuertes que el de ayer-), Fernández (en el primer tiempo fue un azote permanente por derecha, aunque le falló el toque final; además fue el socio perfecto de González), el propio Nacho González (correcto armador, no hizo nada brillante, pero cumplió distribuyendo el juego) y De Pena (el único del medio que no jugó del todo bien, pero igual influyó en un par de goles, así que redondeó una tarde al menos productiva); Alonso (no anduvo preciso ni movedizo, pero igualmente hizo un gol y se sacrificó bastante bajando a juntarse con los del medio, así que cumplió) y Porta (se mostró irascible y ofuscado por fallos dudosos del línea de la Atilio García -quien no le cobró un penal, le cobró mal un offside y no le cobró una clara falta cuando trepaba por derecha- lo cual conspiró un poco con su juego, pero aún así se las arregló para hacer dos goles, así que también cumplió con creces). Los ingresados estuvieron imprecisos (tanto Recoba, como el Morro, como Benegas) pero no se puede decir mucho, pues el partido estaba liquidado cuando ingresaron.
En dos semanas jugamos contra Danubio en Jardines, en lo que sin duda alguna será la primera gran prueba que tendremos para saber si estamos capacitados para ser campeones. Luego llegarán River y El Tanque. Los tres equipos nombrados, junto a nosotros, son uno de los 4 primeros del torneo. Demás está decir que gran parte del futuro del torneo se define en esos partidos.
¡Hay que ganar o ganar!
Vamo' Nacional!
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