Ayer le ganamos a Danubio 2 a 1 y, gracias a otros resultados, llegamos a la punta del Campeonato Apertura. El partido es un fiel reflejo de lo que hemos mostrado en lo que va de la temporada: momentos buenos, momentos malos, y lo mínimo indispensable para llegar al primer puesto.
Si bien una de las primeras jugadas de gol fue de Danubio, los primeros minutos fueron de dominio nuestro. Ellos jugaron partidos, con 3 arriba y 7 en su cancha, y nosotros tuvimos la pelota.
Bueno fue el arma más importante por izquierda, aunque culminó mal casi todas las jugadas (centros pasados, tiros débiles, algún enganche de más); en tanto Luna y Recoba (a veces también con Núñez) generaban el mejor circuito ofensivo del equipo.
El primer gol llegó tras agarrón a Bueno cuando intentaba irse en velocidad. Recoba tiró el centro, el arquero dio rebote, Medina intentó de tijera pero el arquero volvió a tapar, y en ese segundo rebote Luna hizo el gol.
Los instantes posteriores fueron de dominio nuestro, Danubio se vio golpeado y pudimos haber hecho el segundo gol, especialmente con centros de Bueno e intentos de Luna o Medina, pero luego ellos respondieron, crearon superioridad numérica a espaldas de Píriz y encararon a los laterales con dos jugadores, lo cual les posibilitiba o desbordar con una pared o (en caso de que el lateral siguiera al puntero) poder tirar de afuera del área con el volante.
Cuando Danubio empezaba a inquietar, sin embargo, llegó el 2-0. Centro de Recoba desde la derecha y anticipo de Medina, quien apenas rozó la pelota y la mandó al arco. Otra vez Danubio se descontroló luego de eso y tuvimos alguna llegada (recuerdo un contragolpe de Bueno y Medina, en el que el primero decidió hacer la individual en lugar de pasarla y terminó pidiendo penal luego de tirarse al suelo al menor roce).
Sin embargo, la visita reaccionó en los minutos finales y atacó con más hombres. El premio a la insistencia fue el gol del descuento, tras jugada como la que se mencionó antes: Píriz quedó por el camino, le hicieron un 1-2 a Núñez, éste no supo si marcar al puntero o al que tenía la pelota, y en la duda llegó el remate cruzado que significó el 1-2.
El primer tiempo siguió siendo movido en los minutos finales, pero el segundo no tanto. El equipo se cansó, fue más lento que Danubio, se quedó sin respuesta física, y los cambios no hicieron más que acentuar la lentitud del equipo: Taborda careció de movilidad, en tanto que Cabrera no tuvo la velocidad mental para sustituir al Chino como enganche.
Toda la segunda mitad la sufrimos. Si bien tuvimos aproximaciones, Danubio tuvo más y, aunque nunca hubo demasiado peligro en ningún área, siempre podían empatarnos. Además, Díaz hizo entrar a Damonte, y jugamos muy metidos atrás, casi sin vocación ofensiva más que lo que pudiera hacer Luna (ahora por izquierda) o Núñez con Cabrera por derecha.
En definitiva, se ganó, y eso es lo que importa, porque estamos primeros en la tabla de posiciones. Pero no hay que olvidar que, con Carrasco o sin él, siendo Danubio y todo, este equipo de la Curva va penúltimo en el campeonato, y nos hizo sufrir. Seguimos con notables problemas para generar peligro si la pelota no pasa por los pies de Recoba: Bueno tira mal todos los centros y Luna engancha mucho al medio pero nunca le pega al arco ni hace un pase hacia adelante. Medina no es un delantero con mucho gol, es puro huevo, pero le cuesta enormemente hacer un gol. El medio también tiene un problema: Recoba no contribuye en la marca, así que quedan sólo dos jugadores, pero Calzada suele jugar más a la altura de Recoba pero por la izquierda que al lado de Píriz como doble cinco, lo cual deja a Píriz solo contra el mundo. La defensa, además, tiene poca marca en los laterales y últimamente Scotti anda medio perdido, quizás opacado por Lembo.
Los mejores de ayer fueron justamente Lembo y Píriz, que marcaron a todo el mundo en sus respectivas partes de la cancha. El resto tuvo altas y bajas, incluso Bava, quien pese a tapar un par de forma notable, también tuvo una jugada cerca del final en el que casi se le cuela un centro/pelotazo en el arco.
El fin de semana que viene no jugamos, porque el jueves vamos a Córdoba a enfrentar a Talleres en un amistoso. La otra semana se viene Liverpool en el Parque, y hay que ganar o ganar, para encarar la segunda mitad del torneo en lo más alto.
Vamo' el bolso!
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