Ayer derrotamos a Rentistas 3-2 en el Estadio Centenario, con 2 nuevos goles de Porta, quien parece encaminarse a ser el goleador no sólo de Nacional en esta temporada, sino de todo el campeonato uruguayo.
El partido empezó bien, contra un rival que dio muchas ventajas durante todo el primer tiempo. Un tiro de Recoba y luego un pase del propio Chino a César fueron las dos primeras chances de gol cuando no iba mucho más de un minuto de juego.
A los 10 llegó el 1-0, obra de Porta tras pase largo de Recoba desde el círculo central. Luego de eso, el propio Recoba se fue por lesión, ingresando en su lugar Tabaré Viudez (quien, aparentemente, no había entrado como titular por indisciplina). De todas formas el equipo no modificó su funcionamiento y controlamos la pelota todo el partido, buscando desbordar constantemente tanto por izquierda (con Bueno, el mejor de la cancha, pese a que no estoy de acuerdo con el exceso de alabanzas de la prensa "especializada") como por derecha (con César, quien también tuvo un partido interesante).
A los 22 llegó el 2-0, tras la salida de un corner que Porta cabeceó en el primer palo, peinándola por sobre el arquero contra el segundo palo. 2-0 y el partido parecía seguir la línea de la goleada del fin de semana anterior contra Cerrito, en especial porque ya se nos había anulado un gol (a Porta, también) por offside -no sé si estuvo bien cobrado, porque no he visto la jugada ni escuché comentarios- y porque luego le anularían uno a Damonte, en otro corner, por supuesta falta de Rolín, aunque la TV deja muchas dudas, porque el agarrón pareció ser más del jugador de Rentistas que de él.
Rentistas tuvo igual un par de chances, ambas por la izquierda de nuestra defensa, pero culminaron con remates livianos o desviados, y en general dio la sensación de que en cualquier momento podíamos hacer el tercer gol. Sin embargo, en el último instante de descuentos, un tiro libre frontal al área terminó en el descuento de ellos, merced a una muy mala salida de Burián lejos de su arco. El Cachorro sale poco de la línea y, por lo que está quedando demostrado en los últimos partidos, cuando sale lo hace mal.
El segundo tiempo arrancó lento, con un Rentistas más ofensivo, pero igualmente con nosotros teniendo la iniciativa. Nuestro gran pecado fue que carecimos de juego asociado. Todo era Viudez o Calzada o Damonte tirando la pelota larga a los de arriba. De los tres puntas, quien más bajó a tratar de juntarse, por momentos, fue Renato César, pero anduvo torpe con la pelota así que en general sus intentos quedaron en la nada. Bueno, quien anduvo muy bien con la pelota en los pies y volvió locos a todos por izquierda, prácticamente no bajaba y quedaba jugado sólo a explotar su velocidad (lo mejor que tiene, es cierto, pero sería bueno que diversificara más su juego para no volverse predecible). Viudez, por su parte, viniendo de atrás tuvo demasiados rivales a quienes eludir, y lo mejor de él se vio cuando se tiró a un costado, dejando a Bueno en el medio con Porta y él haciendo las veces de puntero izquierdo.
En ese segundo tiempo Bueno tuvo un mano a mano y luego Porta otro, pero ambos fallaron en la definición, y en una jugada aislada en la que Damonte tuvo que cubrir la posición de Torres, el propio argentino se sintió en la carrera y dejó libre al jugador de Rentistas que llevaba la pelota. Su centro fue despejado, pero un nuevo centro terminó, luego de rebotes en el palo y entreveros, en el 2-2.
Iban 15 minutos y Gallardo ensayó los últimos cambios: ingresaron Píriz y Aguirre por el lesionado Damonte y Renato César. De esa forma quedamos con Viudez y Bueno de punteros (generalmente Viudez por la izquierda, aunque en alguna ocasión se alternaron), Porta en el medio y Aguirre de enganche.
El argentino tuvo un buen partido y, luego de un par de jugadas de peligro que pudieron ser gol (una corrida de Viudez y una pelota que bajó al medio Bueno -y alguna otra cosa que ahora no recuerdo-) llegó por fin el gol con un pase notable del 24, entre líneas, que recibió Bueno frente al arquero, y el juvenil la picó sobre éste, contra el palo.
3-2 y desahogo en las tribunas a falta de 15 minutos.
El resto del partido fue bastante sufrido, porque Rentistas tuvo varios tiros libres al área (uno terminó en gol bien anulado por offside luego de un rebote en una atajada muy buena de Burián), y nosotros no podíamos tener la pelota ni generar mucho peligro.
El equipo formó con Burián (falló en el 1-2, pero atajó una clave que pudo ser el 3-3); Núñez (no entró mucho en juego y dio ventajas en la marca), Scotti (seguro, aunque hizo muchas faltas), Rolín (no brilló) y Torres (empezó bien, pero se fue apagando. Igual fue más que Abero en la posición); Calzada (no tuvo un partido muy lucido, pero tuvo una buena actuación), Damonte (sin brillar, pero bien) y Recoba (metió dos o tres notables pases en los 14 minutos que jugó); César (enchufado, peleó, pero perdió más de lo que ganó), Porta (en racha, dos goles y pudieron ser más, pese a que no entró demasiado en juego) y Bueno (el mejor de la cancha, desbordando y enganchando por la izquierda, aunque sigue sin saber muy bien cómo terminar las jugadas). Por su parte, Viudez tuvo un partido con altibajos y chispazos buenos, Aguirre jugó su mejor partido en Nacional haciéndonos olvidar a Recoba con un par de buenos pases y aguantando la pelota; y Píriz luchó mucho, redondeando una buena media hora de juego.
En definitiva fue una victoria medio apagada, quizás hasta preocupante por la fragilidad defensiva que seguimos mostrando y por las lesiones sufridas, pero fue una victoria que -gracias a los resultados de hoy- nos deja primeros en la tabla anual incluso si contamos la "tabla de puntos perdidos", además de acercarnos a la punta del Clausura.
En la próxima fecha nos toca El Tanque y hay que ganar para seguir luchando no sólo por la Anual, sino por el propio Clausura, que aún podemos ganarlo.
Vamo' Nacional!
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