
Anoche, en una invernal noche, con lluvia y mucho viento, derrotamos en tenso partido a Alianza Lima por 1 a 0 y seguimos con vida en la Libertadores.
No jugamos para nada bien, aun cuando tuvimos siempre la iniciativa y se notó la clara intención de desbordar y mandar centros por abajo, y no por arriba como contra Danubio, siendo que no teníamos 9 de área; pero lo importante fue la victoria. En el primer tiempo tuvimos un par de chances clarísimas de gol (erradas ambas por Bueno, de forma increíble, una en un tiro cruzado que le pegó por arriba y la otra debajo del arco), algún centro cabeceado por Scotti y un tiro de afuera del área de Viudez. Ellos tuvieron varios contragolpes, en general no definidos de forma correcta, pero sí más de uno nos dejó con un nudo en la garganta.
La idea del equipo fue jugar por las bandas. Generalmente por el lado de Bueno y Vecino, aunque sin demasiada claridad; pero también por el lado de Vicente Sánchez y Calzada, acompañados de Núñez. Igual lo mejor del equipo vino, como siempre, en los pies de Viudez, aun cuando no hizo demasiado anoche.
En el segundo tiempo empezamos peor que en la primera parte. Nos volcamos siempre por el lado de Núñez y Sánchez, en tanto Vecino y en ocasiones Bueno quedaban solos por el otro lado sin que nadie se animara a hacer un cambio de frente, en parte porque salvo Viudez nadie tiene buen pase, y en parte porque el viento corría generalmente de América a Olímpica, obligándonos a jugar por la derecha en esa segunda mitad.
Rápido en el segundo tiempo ingresó Recoba y le dio un par de toques de calidad al equipo, metiendo pases jugando como un 5 y luego juntándose más arriba con Viudez y Vecino.
Igualmente, aunque la primera chance de gol clara en esa segunda mitad fue de Vecino, mucho más clara fue una de Alianza Lima en la recarga, con un tiro cruzado, con comba, que pasó a centímetros del palo. Iban 15 minutos, más o menos, y el partido estaba definitivamente complicado, como el clima, pues llovía en círculos y a veces hasta era imposible mirar el campo de juego porque la lluvia venía de frente.
A los 22 minutos llegó el gol. Una pelota que luego me enteré fue offside (en la cancha no pareció así) rebotó y derivó hacia un costado y Sánchez la mandó fuerte al medio, por abajo, donde Viudez la mandó a guardar medio con el taco. Un gol en base a empuje, a nervio, cuando el rival empezaba a aprovechar mejor los contragolpes.
Luego de eso nos serenamos y fuimos más durante unos minutos. Recoba, juntándose con Viudez y Vecino, generaron algo de peligro, pero poco a poco, y con los cambios (Abero por Bueno y luego Romero por Vecino) nos fuimos metiendo más atrás y el rival nos empezó a llegar. No hubo chances de gol claras, sólo pases largos, centros que no culminaron bien, tiros libres desde los lados, pero la sensación era angustiante porque con la lluvia, la pelota mojada, siempre podía pasar algo raro.
Con ese panorama tuvimos igualmente alguna chance de liquidar el partido. Un tiro de Recoba que salió muy débil, luego un contragolpe en el que Calzada quedó mano a mano con el arquero pero no pudo concretar, y ya pasadísima la hora, otro mano a mano de Vicente Sánchez terminó nuevamente en manos del arquero rival.
En definitiva, ganamos, y seguimos en la pelea.
El equipo formó con Burián (estuvo atento para cortar pases largos, y no tuvo demasiado trabajo aparte de eso y algún tiro débil de afuera del área); Núñez (subió bien por momentos, descuidó la marca en otros, pero no anduvo mal), Scotti (sigue en debe, es muy desordenado, hace faltas lejos del área), Rolín (buen trabajo en general, con su velocidad y su altura) y Torres (otro buen partido en la marca, aunque le sigue costando subir); Calzada (un león en la mitad de la cancha, hizo lo que pudo también para conducir al equipo), Píriz (marcó bien, a veces con excesos, pero volvió a fallar a la hora de pasar la pelota) y Vecino (sigue sin mostrar lo mejor de él, pero ha levantado su rendimiento, buscando mejor el ataque, yendo en ocasiones al área a cabecear e incluso marcando); Sánchez (sigue lejísimos de su nivel, muy falto de confianza, pero al menos nunca baja la cabeza y sigue insistiendo aunque le salga todo mal), Viudez (medio perdido en este partido, igual cada vez que tocó la pelota mostró un poco de su indiscutible caliudad), y Bueno (muy falto de confianza para encarar, igualmente fue peligroso por su lado, mandando centros por abajo, fue el más buscado en la ofensiva en el primer tiempo). Ingresaron Recoba (tuvo toques de calidad y buen fútbol, pausa y pases criteriosos, algo que no tuvimos nunca en otro jugador), Abero (no entró mucho en juego y sólo contribuyó a que el equipo se retrasara más) y Romero (entró como 5 y básicamente sólo hizo un par de faltas feas, una le valió la amarilla y la otra bien pudo ser la roja... igual jugó muy pocos minutos como para opinar de su tarea).
En una semana viajamos a Paraguay, y será otro partido clave: una derrota nos puede dejar afuera de la Copa (si además gana Vasco contra los peruanos), pero hay que ir con fe.
Vamo' Nacional, que hay que seguri en la Copa... no como otros!
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