Ayer derrotamos a Fénix 2 a 0 en el Estadio Centenario, jugando de forma horrible, en un partido que, de no haberse desvirtuado por una expulsión al rival, difícilmente nos habría valido los tres puntos.
Creo que con sólo decir que en el primer tiempo sólo tuvimos una chance de gol, virtud de un contragolpe veloz de Fucile que culminó en centro rasante conectado de mala forma por Fernández, creo que puede darse una idea de lo mal que jugamos.
Pero hay que ir más allá: la movilidad de nuestros jugadores fue nula. Se los notó poco concentrados en el juego, sin ninguna asociación colectiva, faltos de ritmo, de velocidad. Fue normal ver al Colo Romero (de penoso partido) trotar casi en círculos desde la banda hasta el círculo central, en un movimiento que pareció robótico y no hecho a conciencia; fue penoso el nivel de nuestros laterales, pues ni Espino ni Fucile hicieron nada por abrir la cancha... Fucile apenas subió dos veces (en la ya mencionada chance de gol, y en una segunda ocasión en la que terminó lesionándose solito)... fue tan alarmante la falta de juego por las bandas y la falta de concentración, intención e intensidad especialmente por derecha, que en una ocasión Gorga salió con rebeldía corriendo al ataque con balón dominado y dejó parados como postes tanto a Fucile como a Romero.
Realmente, salvo ataques prolijos pero mal culminados de Fénix, en ese primer tiempo no pasó nada de nada. Incluso cuando Fénix se quedó con uno menos, en ningún momento los inquietamos o generamos nada. Ni siquiera lo intentamos. Amaral perdido, Alonso y Fernández aparecieron en cuentagotas, Porras impreciso como nunca, Abero intrascendente pese a tener un poco más de ganas que el resto de los volantes; y nuestras figuras fueron Polenta y -especialmente- Gorga; los zagueros.
En la segunda mitad, es cierto, mejoramos un poco. Con Nacho González siendo la manija -entró por Fucile a los 40 del primer tiempo, pasando Romero al lateral-, generamos alguna acción de riesgo con interesantes triangulaciones en las que se sumaban Alonso, Fernández, Amaral y Abero.
Tuvimos alguna llegada, algún tiro al arco débil, algún remate de lejos, algunos centros bien despejados por la altísima defensa rival. Dio la sensación de que en cualquier momento íbamos a hacer el gol, que sólo bastaba que alguien definiera bien.
Y el gol llegó, aunque de la manera más impensada e incluso absurda. Falta sobre Alonso (que dicen que no fue, no la he visto en TV), centro en forma de pelotazo al corazón del área chica, y Pallas marca en conttra anticipándose a las manos del arquero, quien llegaba a retener o despejar sin nadie molestándole.
1 a 0 y a sufrir... porque Fénix se fue arriba y, si bien nos dio chances de contragolpear, nos cambió ataque por ataque, y tuvo las más claras. Pérez tuvo dos remates cruzados que bien pudieron ser el empate, en tanto nosotros tuvimos también alguna chance de liquidar el juego, pero definimos siempre mal (realmente no recuerdo una atajada seria del arquero de ellos, ni ningún "casi gol"... salvo un cabezazo solito del Colo que se fue afuera increíblemente).
Pasamos demasiadas zozobras innecesarias por la absoluta inoperancia que mostramos en todas las líneas; porque incluso generamos varios córners increíbles por errores defensivos, no estuvimos finos en el medio y nos robaron mil veces la pelota; Porras no atinó a hacer nada más que pasarle la pelota a Conde... Fue realmente pobrísimo todo lo que se vio de Nacional durante los 90 minutos y más habiendo jugado 55 de ellos con un hombre de más.
Formamos con Conde (alguna atajada en el primer tiempo, salió bien a los centros en el segundo, salvando alguna situación complicada que pudiéramos tener por arriba; de lo mejor del equipo); Fucile (poquísimo, recién empezaba a mostrar algo cuando se lesionó y debió salir), Gorga (el mejor de los nuestros, firme por arriba, sacó varias por abajo y fue el único que mostró rebeldía o ganas en el primer tiempo), Polenta (un par de quites, algún intento de adelantar al equipo, buen partido en general también) y Espino (apagadísimo en el primer tiempo, mejoró en las subidas en el segundo; pero fue poquito en la marca todo el partido); Romero (su peor partido de la temporada, pésimo primer tiempo, y peor segundo tiempo estando de lateral, pues lo pasaron todos todo el tiempo y no sacó una pelota jamás), Porras (opaco partido, intentó poco en ofensiva y se dedicó más a marcar y pasar la pelota atrás) y Abero (no aportó demasiado... desde que juega no nos han hecho goles, pero no encuentro nada en su juego que relacione su presencia con ese hecho... simplemente está en cancha, pero no hace demasiado ni en ataque ni en defensa... quizás lo mejor que aporta es su presencia donde se le necesita); Amaral (apagadísimo, apareció en cuentagotas y sólo en el segundo tiempo); Fernández (movedizo, inquietó a la defensa, pero entró poco en juego y no se lo notó fino en la definición o con la pelota en los pies) y Alonso (aportó lo de siempre, peleó todas las pelotas -que fueron menos que de costumbre, porque ni pelotazos tiramos; se juntó bien con González en la segunda mitad y generó algo de juego pivoteando algunas veces mal pero muchas otras bien). Ingresaron González -por Fucile- (se puso el equipo al hombro desde que entró, fue el motor ofensivo del equipo, si bien no se puede decir que tuvo un gran partido ni mucha claridad, pero fue lo más positivo ofensivamente), Cabrera -por Amaral- (se juntó bien con Nacho y con Alonso, tuvo un par de destellos de calidad) y Barcia -por Fernández- (entró más que nada para hacer tiempo, pero se dio el lujo de recordarnos que anda con el pie torcido y se fue solito para afuera en una chance clarita de gol en la que prefirió correr en lugar de cruzar el remate).
En definitiva, creo que fue el peor partido en mucho tiempo. Mucho, pero mucho tiempo. Pero lo positivo fue que ganamos, y no siempre hemos sacado 3 puntos jugando pésimo. Eso es bueno, porque podemos mejorar sabiéndonos aún punteros en solitario y 3 puntos arriba.
El domingo que viene jugamos en el Parque contra Sud América, y hay que ganar o ganar!
Vamo' Nacional!
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