El sábado empatamos 2 a 2 contra Defensor en el Parque Central.
En una tarde fea, lluviosa, y con poco más de 10 mil personas en nuestro debut en casa (en parte por el clima, y en parte por el sistemático error de nuestra dirigencia de poner preciosa absurdos en la tribuna Atilio García), volvimos a dejar puntos en el camino y a dejar más preocupaciones que certezas.
Dos goles de pelota quieta uno al principio de cada tiempo, y dos empates nuestros agónicos en cada uno de los tiempos también, sellaron un partido que tuvo sus buenos y sus malos momentos para nosotros.
En el primer tiempo, un error de Coates en un corner posibilitó a Defensor ponerse en ventaja a los 6 minutos. A partir de ahí sufrimos unos minutos de desconcierto en los que parecíamos estar al borde del knockout, pero promediando ese primer tiempo reaccionamos y comenzamos a generar peligro.
Igualmente en ese primer tiempo no generamos casi ninguna chance de gol, hasta que en una jugada individual de Viudez, entreverada, terminó en un penal que Porta cambió por gol.
El equipo formó con Muñoz (tapó un par, no pudo hacer mucho en los goles); Márques (mal, como generalmente, hizo alguna cosa subiendo), Coates (marcó todo atrás, aunque sus dos errores terminaron en goles de Defensor), Viera (flojo y lento, anduvo perdido en el partido) y Placente (mal, no marcó a nadie, no generó mucho en ofensiva y fue superado constantemente por arriba); Vecino (no anduvo bien), Píriz (marcó lo que pudo, pero como Defensor abrió mucho la cancha, se sintió incómodo yendo a los lados), Cabrera (tuvo altas y bajas, pero en general anduvo bien... me siguen preocupando sus excesos de lujos) y Sosa (no hizo más que juntarse con Placente y patear al arco de cualquier parte); Viudez (lo mejor del equipo, sin ser brillante) y Porta (flojo, no tiene madera ni de 9 ni de puntero... no tiene lugar en el equipo tal cual está).
El cambio en la formación resultó interesante pese a no haber generado mucho peligro, porque nos mostramos mejor que contra River. Nos faltó peso arriba nada más. Vi como positiva la exclusión de Poclaba, porque demuestra que Gallardo no se "casa" con nadie y sacó a quien jugó peor el partido anterior. Lo malo es que Placente no justifica su presencia en el equipo y también debió ser excluido, y no Rolín.
En ese primer tiempo lo más destacable fue el grosero error arbitral al no expulsar a Fleurquin antes de los 20 minutos tras haber hecho 3 faltas duras luego de haber sido amonestado (el DT rival lo sustituyó inteligentemente). Eso hubiera cambiado el rumbo del partido, porque ya estábamos dominando a Defensor en esos momentos.
En el segundo tiempo un gol tempranero (un centro llovido que Risso apenas rozó y terminó metiéndola contra el segundo palo, lejos del alcance de Muñoz) nos hizo volver a estar en desventaja. Igualmente fuimos más que Defensor, y generamos alguna chance de gol.
Gallardo puso a Medina y a López por Porta y Vecino, y tuvimos un par de llegadas que bien pudieron ser el empate.
En una curiosa jugada en la que Medina marcó y peleó la pelota contra defensores del rival, se dio la segunda polémica arbitral grave: uno de los jugadores rivales se exasperó y le dio un cabezazo al Cacique, increpándole vaya uno a saber qué. El árbitro (quien protagonizó otros momentos risorios cobrando córners inexistentes, faltas dudosas o dejando seguir en faltas claras) expulsó al agresor y también a Medina. Inexplicable por donde se lo mire.
Esa expulsión nos quitó todo el poder ofensivo. Con López de 9 se hizo casi imposible llegar con peligro, aunque igual el Conejo tuvo alguna pelota para empatar.
Entonces Gallardo ensayó el último cambio: Recoba por Márques.
Entregados atrás, Defensor tuvo alguna chance de liquidar el pleito y, aunque nosotros merodeamos el área de ellos los últimos 10 minutos, no generamos demasiado. Con Viudez cansado, Cabrera sin ideas, Recoba repitiendo malos pases uno tras otro y Sosa no haciendo más que patear al arco, parecía imposible empatar. Pero el equipo fue y fue arriba todo el tiempo, con corners, tiros libres, triangulaciones cerca del área, y eso es algo para valorar.
Y tanto ir a buscar el empate, por suerte, esta vez no quedó en la nada; ya que en una magnífica jugada pasada la hora, Recoba mostró que es uno de esos jugadores especiales, y clavó un tiro cruzado al estilo Inglaterra.
2 a 2 y punto rescatado, al menos.
Desafortunadamente ya tenemos 4 puntos perdidos y rondamos los últimos puestos de la tabla.
Igualmente, esto mismo sucedió en los últimos 2 torneos y todos sabemos que terminamos peleándolos hasta el final. Confío en que en esta ocasión será lo mismo, porque tarde o temprano arreglaremos los desajustes defensivos (con o sin Coates) y aún sin haber ganado veo bastante saludable la intención de juego de mitd de cancha hacia adelante.
Vamo' el bolso! El fin de semana que viene hay que copar el Tróccoli para meternos en la pelea!
Saludos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario