El Clausura empezó de igual manera que los torneos de verano: mal. Con un equipo generalmente inexpresivo que carece de sociedades y de peso en ofensiva. Y, emcima, con un empate en la hora.
En el primer tiempo tardamos en crear opciones de gol. Tuvimos un par de tiros desde lejísimos (uno de Flores y uno de Píriz), mientras Wanderers tuvo dos contragolpes en los que nos quedamos en inferioridad numérica y bien pudieron ser gol.
Nuestra primera llegada seria de riesgo (hubo algún entrevero previo en el área, y esos dos tiros buenos pero lejanos que mencioné antes) fue un pase largo al Morro por derecha, el cual tocado por un defensa se abrió. El Morro levantó un buen centro y Peralta cabeceó bastante bien, pero el arquero de ellos se mostró firme.
Luego un cabezazo de Porta entrando por la derecha tras centro largo desde la izquierda, y un tiro desviado de Peralta tras jugada individual.
Fue poco para un equipo de Carrasco.
En el segundo tiempo salió Flores, de espantoso partido a mi entender (pese a un par de aciertos), y entró Fornaroli de 9. El equipo mutó de forma extraña entonces, porque Porta alternó de enganche con Peralta (no entiendo por qué no puede ser Peralta el enganche siempre, y no Flores u otro más) y el Morro se fue de puntero.
La idea, en principio absurda, dio resultados al menos, porque en esa segunda parte fuimos mucho más agresivos que en la primera. Igualmente no generamos demasiadas opciones de gol. Ellos controlaron bien a nuestros 4 puntas y a nosotros nos faltó movilidad. Apenas un centro frontal terminó con un cabezazo de Porta que pudo haber sido aprovechado mejor si lo enviaba como centro al medio.
El gol nuestro fue a los 20 minutos, tras una grosera falta de Pereyra no sancionada, éste la abrió al Morro que estaba solo por derecha y su centro terminó en gol en contra de Quagliotti en su intento por evitar que Porta anotara.
En esos momentos éramos más y lo seguimos siendo un buen rato. En un tiro libre le anularon bien un gol al Morro por agarrón; luego Fornaroli hizo una gran jugada pero definió mal ante la salida del arquero... pero poco a poco ellos nos fueron dominando y tuvieron sus llegadas, especialmente por nuestra izquierda (donde ya jugaba Córdoba) y por el centro, donde generaron algunos tiros libres.
En uno de esos tiros libres, pasada la hora, nos empataron. La pelota dio en Coates, pero la enviaron otra vez al área y el propio Quagliotti cabeceó por sobre Muñoz.
Fue un mal partido nuestro, en el que casi nadie jugó bien. Píriz marcó como siempre, pero cometió muchas faltas; Cabrera y Pereyra entraron poco en juego (el segundo, además, pegó mucho), los de arriba muy estáticos, nadie creó fútbol, Muñoz inseguro (tuvo una atajada fortuita con los pies, no reaccionó en el gol; anda igual de mal que el año pasado) y la defensa fue lenta e insegura, teniendo Coates que salir mucho a la descubierta.
Mal arranque de campeonato, pero hay que tener fe.
El viernes que viene nos toca Fénix.
Vamo' el bolso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario